miércoles, 25 de julio de 2012

Sobre ídolos y cholulismos





La verdad es que a esta altura del partido no se me ocurriría ser cholulo o fanático de nadie. Los años vuelven incrédulo a cualquiera. No creo en ningún ideólogo, en Pat Metheny ni en Pastore, Angel Cappa y el Turco Mohamed juntos! Cualquiera puede traicionar nuestra buena fe a la vuelta de la esquina, como un Nemen, un padre Grassi o Schoklender. Entonces, aunque suene horrible, desconfiar se hace sinónimo de buena salud mental.

Como muchos jóvenes con alguna figura pública, yo me fanaticé con Juan Domingo Perón durante años. Leía todo sobre "el General", me atrapaba su doctrina y su movida política casi épica junto al pueblo humilde que osó reivindicar en la Argentina, sin dobleces. Setenta años después de su llegada todavía vemos su obra. ¿Quién pudo pisarle el poncho? Claro que este estadista tuvo su costado maquiavélico y hasta manchado de sangre cuando la Triple A. ¿Quién lo hubiera dicho? Como lo tuvieron Sarmiento, Mitre, Rosas, Yrigoyen y tantos próceres de cualquier signo. Lo que no disculpa a ninguno porque fallaron. Y mal. Fueron todos repudiables más allá de sus aciertos visionarios. ¿Será que en el camino al poder se van perdiendo escrúpulos y humanidad?

Hablando de ídolos, la entrega del Che Guevara fue irreprochable. ¿Cómo no engancharse con su imagen rebelde? (si tenés al menos alguna burbuja en tu sangre) Pero, como la revolución cubana, no es un artículo de fe. Su visión tuvo aristas contradictorias; su paradigma del hombre nuevo fue una utopía escupida al rebaño conformista.

Debo encontrar siempre alguna excusa por no animarme a imitar el ejemplo de gente como Gandhi o Teresa de Calcuta (con su irrefutable "dar, hasta que duela"). De lo contrario quedaría en evidencia mi profunda cobardía y las conclusiones me arrojarían al suicidio. Podría decirse que ningún profeta ha podido siquiera mellar las injusticias del mundo. Ensalzar pensadores es más fácil, porque todo queda en el terreno de las ideas, muchas veces lejos del barro. No hablemos de endiosar artistas, una trivialidad cuasi-adolescente a la que me dedicaré otro día porque no merece mucha energía.

Quizás lo común a todas las personalidades públicas es que el tiempo va desnudando sus contradicciones, mostrando sus flaquezas. Por eso que "el pez por la boca muere", en algún momento muestran su faceta fascista o egoísta. Y nos desilusionan.

Cuando hace unos días vimos con Silvia entrar a Eduardo Galeano en el bar Brasilero de Montevideo -donde concurre habitualmente- casi se me caen las medias (¡que expresión anticuada!). Me enfrentó al dilema de fingir indiferencia o expresarle mi admiración. Tomé ánimo, metí mi timidez en el bolsillo trasero y lo fui a saludar ya en la vereda, cuando se iba. No quería reprocharme luego mi inacción y me obligué. Como es de suponer para un hombrecillo del común, me presenté con una frase de ocasión no muy afortunada, pero Galeano fue muy cortés conmigo y me alegró aún más el viaje. Supongo ahora, porque gente enorme como él es humilde y paciente.

En nuestra fugaz visita a la capital uruguaya nos decidimos encontrar ese tradicional café con más ahínco todavía después que cuatro corteses orientales nos mandaran a buscarlo a lugares diametralmente opuestos. Es parecido a los nuestros cercanos a Plaza Dorrego, en San Telmo.

He leído una mínima parte de la obra literaria de Galeano porque me cuesta abordar cualquier tipo de ficción. "Las venas abiertas de América Latina" me parece invalorable (debería ser material de estudio obligatorio) aunque a esta altura el mismo escritor ya detesta ese antiguo hijo suyo. Pero después de tantos años creo que ha demostrado ser el pensador humanista más coherente del sur. Y, como si fuera poco, acusa al sistema sin dobleces, explicándolo a los poco luminosos. Para hacer comparaciones odiosas, de Feinmann he leído cinco veces más y hasta me he hecho adicto a su obra. Pero su persona poco me interesa porque peca de soberbio y es tan iconoclasta que desorienta.

Me llamó la atención a mi mismo ese súbito arranque de cholulismo mío en la calle Ituzaingó, aunque no se tratara de pedir autógrafos. Me refiero a la emoción que me produjo esa presencia. Porque no me disparó igual hace unos pocos meses cuando tuve a mano a mi admirado Pino Solanas en Olivos en una presentación de "Tierra sublevada-Oro negro". Ni al cruzarme con Hermes Binner en Río Ceballos (el socialista santafesino que se cuida tanto de hablar boludeces, a quien terminé votando en las últimas elecciones). Eso si, me arrepentí en la Av. Corrientes de no saludar a Rogelio García Lupo, en enero pasado: para quien no sabe de él, un periodista de investigación ya grande, compañero de Rodolfo Walsh, que se la jugó mucho en tiempos difíciles y creo que no fue suficientemente reconocido.

Eso es todo, escribir un poco sobre sentimientos y emociones. Un beso en la reja. Horanosaurus ("el cholulo porteño").

PD1: me sigo topando con gente con huevos y respetable. Increíblemente, en medio del apretujamiento de la Plaza de Mayo -el 10 de octubre/12- durante el mitín de la CTA y la CGT no oficialistas, otra vez ahí nomás Pino Solanas, Jorge Micheli y Víctor De Gennaro. Como siempre diciéndole un rotundo no al mentiroso capitalismo de amigos de Cristina Kirchner y sus ladrones, que le quieren vender a la gente como progresismo.




PD2: la mujer en la 2da. fotografia -con Galeano atrás- pertenece a otra categoría: ademas de mi ídola, es quien a la vez me soporta y me da órdenes a diario ¡hace casi treinta años!

PD3: pasado un tiempo, me tropecé con el reportaje a Eduardo Galeano que Jorge Lanata le realizara para su libro "26 personas para salvar al mundo" (2012). De allí extraje estos párrafos tan interesantes como oportunos:


"Yo nací en Montevideo. Fue una suerte porque esta ciudad me gusta. Es una ciudad donde todavía se puede respirar y caminar, que son dos actividades humanas importantes. Yo soy un caminante, yo camino la vida, camino horas cada día. Voy de un lugar a otro caminando. Todo lo que puedo hacer caminando, lo hago caminando".

"(camino) siempre, por el borde, por la orilla de este río-mar, este río ancho como mar y mientras yo camino las palabras caminan dentro de mi y así van naciendo las historias que cuento y que escribo. Entonces me gusta mucho una ciudad caminable, que se pueda caminar sin violencia y respirable porque aquí hay muy poca contaminación, casi nada… la gente es cordial, además. Y bueno, me gustran los cafés sobrevivientes que son muy poquitos. El Brasilero, donde sigo yendo porque siempre me recuerda que yo les debo todo a los cafés de esta ciudad. Todo lo que sé en materia de comunicación humana. Fíjate que yo hice sólo seis años de escuela y uno de secundaria. No aprendí nada en ningún lado. Lo que aprendí, lo aprendí en los cafés, aprendí el arte de narrar escuchando a esos narradores orales que contaban historias vividas o imaginadas en los cafés de mi ciudad, los cafés montevideanos, esa fue mi universidad de verdad, donde me formé. Les tengo una enorme gratitud.

"Una vez escuché: 'Estás triste como uruguayo contento', y me hizo gracia, por lo certera. Y no lo vivo como una ofensa, nosotros somos en general muy melancólico, así tristones, es verdad. Y lentos, lentos hasta para el fútbol. Tengo una parte de mi que es así también, pero otra que no. A veces reconozco que pueden tener cierta razón los que dicen que es aburrido vivir aquí, pero para mí no. Mentiría si dijera. “Yo también me aburro aquí”. Porque, además, podría tranquilamente vivir en otro lado. Tengo la suerte esa de que mi oficio de escribir, que es mi vocación, que es mi destino, lo que me gusta, me da suficiente dinero como para vivir dignamente en cualquier sitio. Yo elijo este lugar porque lo amo y porque caminando esta ciudad, yo me camino, camino mis adentros y en mí caminan las palabras que se van enredando entre si para construir historias".

 


domingo, 22 de julio de 2012

Frases archivadas IV





"El mundo está destinando tres millones de dólares por minuto a la industria militar, que es el nombre artístico de la industria de la muerte, mientras que al mismo tiempo, por minuto, mueren de hambre o de alguna enfermedad curable quince niños". Eduardo Galeano. Entrevista de Daniel Viglione en Revista Ñ. 06/04/12 (*) 


"... no hay escuelas de paternidad, y si las hay, no sirven. Como apunta el doctor House: Your parents always screw you up. Los padres siempre te joden, hagan lo que hagan, incluso, (si al cosa existe) cuando son perfectamente normales". Artículo "¿Pero ustedes todavía siguen enamorados?". María Rosa Lojo. Clarín. 07/04/12.


"Reconoce tu idiotez y serás un idiota lúcido".   Eduardo Echenique  en  Cuentos de Fontanarrosa.


"Sebreli: vos andá al arco". Juan Sasturain.


"Cuando uno llega a cierta edad, tiende a decir su verdad profunda, por lo menos hasta donde la conoce, ya sin ánimo de impresionar a nadie. Es hora de mostrarse". Rolando Hanglin. Columna "Pensamientos incorrectos". La Nación. Enero 2012.

"Cuando uno se encuentra con las cosas raras de la vida y la historia, entiende que debe empezar a estudiar. Porque todo, absolutamente todo, está en los libros. Y nada, absolutamente nada, hay en los foros de internet, más que insultos, exclamaciones, orgasmos de cuatro letras y frases sueltas". Rolando Hanglin. Columna "Pensamientos incorrectos". La Nación. Enero 2012.


"Pertenezco a la generación de lo que alguien llamó 'los hermanos menores': lo vimos todo pero no fuimos protagonistas. Eso nos permite, tal vez, darnos libertades de pensamiento y espíritu crítico que son más inusuales en generaciones anteriores". Hinde Pomeraniec. "Matar y morir por una idea". La Nación. Opinión. 14/07/12 (**)


"El peronismo no es populismo, es revolución". John William Cooke, 1962.


"En los '70 el enemigo del peronismo era el imperialismo yankee. En el siglo XXI es Mauricio Macri... extraña parábola ideológica". Horacio de Caxaraville.  Munro, Bs. As. Junio 2011.



(*) Asociación libre de Horanosaurus: amigo del alma Galeano, cualquier presidente de EE.UU. en gira de seminarios contestaría cínicamente  "Es el capitalismo, estúpido".  Y solo podríamos putearlo.


(**) Asociación libre de Horanosaurus: me siento identificado pero ¿no deberíamos habernos embarrado un poco?






viernes, 20 de julio de 2012

El clásico de barrio más grande del mundo



San Lorenzo: ¡un baño de realismo!

Pensar que muchos hinchas de San Lorenzo no querían a Huracán de clásico futbolero, de tanto que le habían ganado. Presa fácil, pensaban. Se sintieron el Barcelona de Sudamérica sin ganar nada y quisieron tener su derby con Boca Jrs. porque también les iba más o menos bien con los "bosteros". Pero éstos -con tantas copas locales e internacionales de diferencia- los despreciaron. Al fin y al cabo, lo suyo fue siempre con River Plate. Ni siquiera los aceptó Vélez Sársfield, un club más chico en todo pero que visitó Japón por la copa intercontinental. Igual que los de Argentinos Juniors los cargan con la bandera nipona. ¿Porqué no cargan a otras hinchadas con la bandera de Japón y a San Lorenzo, sí? ¿Casualidad o todos pensamos lo mismo de ellos? 

Los "cuervos" tuvieron que aceptar la realidad: es que cuando caés bien abajo recordás tus orígenes.  Te lo dice cualquier buen tango. Está de moda en estos años hacerse pasar por víctima de dictaduras, aunque hayas estado debajo de una cama, haciendo negocios o boludeando en otra mientras la calle estaba brava. Buscarle la vuelta épica a la cosa,  digamos. Después de tantas mudanzas ahora se acordaron de volver a Boedo e inevitablemente también del Globo de Parque Patricios, que siempre estuvo ahí. Jamás viene mal   un baño de realismo. Este excelente artículo del periodista Waldemar Iglesias en Clarín, aunque pueda exagerar en algunos adjetivos, quizás les enseñe un poco de historia a los que no saben mucho. Horanosaurus.

PD: lo continúo diciendo, conozco varios "cuervos" que -muy lejos de ser soberbios- son  gente sensible y ubícua. Doy fe. Esta introducción está escrita para la mayoría cuerva soberbia porque creo que mis verdades les caben. Sinceramente, detestaría ofender a los otros y si alguno se topa con mi pensamiento, espero que me entiendan y les pido perdón. ¡Tampoco soy Sartre! 

El clásico de barrio más grande del mundo

San Lorenzo y Huracán es el más porteño de todos los partidos posibles. Nació en 1915 y se transformó en tradición del fútbol argentino. Ahora, desde categorías diferentes, volverán a enfrentarse. Clarín Martes 17 de julio de 2012. Por Waldemar Iglesias.

Es el mediodía de un jueves en Buenos Aires. En la esquina de Caseros y Trole, en la difusa frontera en la que Parque Patricios se hace Nueva Pompeya, hay un bar que también es restorán. Se llama San José, pero la mayoría de los clientes y/o visitantes ocasionales lo conocen con un nombre más afectuoso: Lo de Luisito. Allí se respetan los viejos ritos del aperitivo bien servido, de la soda en sifón, de la charla con el mozo, de la polémica con el de la mesa de al lado. Al entrar, se respira barrio. Al salir, la tradición porteña queda impregnada en la piel. También allí habita el fútbol más allá del campo de juego. En la mesa más cercana a la puerta, acontece una sucesión de lamentos: hablan del Huracán de estos días, que evitó el descenso a la tercera categoría en la penúltima fecha. En diagonal, contra la ventana, otras tres personas almuerzan masticando el recuerdo de la angustia que ya se fue, al menos por un rato: dicen que nunca los hizo padecer tanto el San Lorenzo de sus corazones; ni siquiera en aquel 1981 que prefieren olvidar. Los unos y los otros se miran, se escuchan de lejos, se saludan al partir. La impresión nace y permanece: es zona de clásico; y acá el clásico se juega todos los días. A pocas cuadras de esa esquina las paredes hablan. "San Lorenzo, si no existieras te inventaría", dice una pintada con dos aerosoles: uno rojo y otro azul. Pasando Chiclana, otra pared cuenta una resistencia: "Huracán, qué mal me hacés y sin embargo te quiero". También hay, lamentablemente, otros mensajes menos originales y muy hostiles, propios de estos tiempos violentos y empecinados en robar la mágica esencia de una rivalidad casi centenaria.

Desde sus días fundacionales, aquella primera década del Siglo XX, el clásico entre San Lorenzo y Huracán era una fiesta de personajes irrepetibles, de cracks repartidos, con el tango como inevitable música de fondo. Era también el más porteño de todos los partidos posibles, una suerte de campeonato aparte entre esas dos barriadas que se dividían el sur de un Buenos Aires que se asomaba al crecimiento. Desde el primer encuentro, en 1915, se trató de una cita armónica en tiempos en los que la cuestión de pertenencia geográfica delimitaba también pasiones. El Santo y El Globo. Los de Boedo y los de Parque de los Patricios. Nacieron vecinos, allá en 1908. Barrios bravos, de laburantes, de empedrados nacientes, de construcciones módicas, de almacenes que todavía fiaban, de bares que cobijaban desencantos. Se criaron y crecieron como tales, bien cerca, con historias entrecruzadas, con el encanto de la rivalidad sin enemigos. La Avenida La Plata fue territorio de estadios emblemáticos de ambos. La distancia no excedía el puñado de cuadras, las fronteras se recorrían caminando sin miedos y sin desprecios. Se miraron siempre de reojo, pero sin rencores ni amenazas. Como primos, casi como hermanos en disputa sana. La maldita violencia llegó mucho más tarde, ya en los noventa, con el folclore en terapia intensiva y con el crecimiento del fenómeno de los barrabravas como escenario dominante.

Lo escribió Fabián Casas -poeta, narrador, periodista y azulgrana visceral- en un entrañable intercambio de cartas con Viggo Mortensen, a través del sitio oficial de San Lorenzo: "Te confieso algo: cuando vi cómo Huracán se estaba yendo a la B por culpa de la suculenta goleada que le estaba aplicando Independiente, cuando vi las escenas en las que el Turco Mohamed se agarraba la cabeza en el banco, se me llenaron los ojos de lágrimas. Yo tengo un gran respeto por el adversario. Yo quería que el Huracán de Cappa saliera campeón y nunca, bajo ningún punto de vista, que el Globo descienda a la B ¿Para qué? Me parece que en nuestro país no hay un culto positivo del Adversario, cosa que hasta la Iglesia Católica tiene con el diablo. Sin el Adversario no somos nada. La misma adversidad es la que nos potencia". Viggo -la misma estrella de Hollywood, el Aragorn del Señor de los Anillos, que adoptó para siempre las calles de Boedo como su lugar en el mundo- también ofreció gentilezas en la respuesta: "Creo que el equipo de Huracán que dirigió Cappa en 2009 fue el argentino que más se pareció al Barcelona de Guardiola en los últimos años. Jugaba un fútbol hermoso y debió ser el campeón del Torneo Clausura ese año. Vélez fue favorecido en el encuentro decisivo contra Huracán por un arbitraje infame. Los jugadores de Vélez no tienen la culpa de eso, por supuesto, pero el mejor equipo no ganó el partido y el torneo ese día. Así son las cosas a veces en la vida. No siempre gana la excelencia creativa. Como escribió Heidegger, 'Queda como tarea ver el enigma'. Puede sonar extraño que, siendo Cuervos, hablemos tanto y en términos tan positivos de Huracán.Como decís, hay que respetar al adversario. Cuando juega bien, merece que se reconozca".

No es ni tan casual ni tan infrecuente esa suerte de afinidad. Se percibe en cada emprendimiento solidario compartido entre la Subcomisión del Hincha de San Lorenzo y la Fundación Corazón Quemero. Néstor Vicente -ex candidato a presidente de la Nación y ex titular de Huracán- es el más prolífico de los autores sobre temáticas vinculadas al club de Parque de los Patricios. Cuando estaba por escribir su libro "Del Globo y de La Quema" pensó: "¿Cómo no voy a incluir un capítulo que se refiera a San Lorenzo en un libro de Huracán?" Y lo incluyó, claro. Lo hizo bajo un título que ofrecía también sensaciones: "Cómo olvidarte en esta queja...". O como se preguntó el poeta Horario Ferrer -creador de la Academia Nacional del Tango e hincha de Huracán- en la Feria del Libro de 2010: "¿Por qué no vamos a querer a San Lorenzo?". En su sonrisa breve estaba implícito el inquebrantable reconocimiento al rival de siempre.

Los números de la historia cuentan que San Lorenzo es el amplio dueño del clásico. El partido inicial se disputó el 24 de octubre de 1915, en la cancha de Ferro, lo ganó el equipo de Boedo 3-1 y marcó el recorrido desde entonces. Contando desde esa cita, por encuentros de Primera División jugaron 162 veces y la ventaja es azulgrana: 78 victorias contra 41. Además, también se enfrentaron en 10 ocasiones por Copas oficiales de la AFA: cuatro triunfos contra tres es la diferencia en favor de los Santos. La única mínima ventaja para los de Patricios sucedió en amistosos (siete éxitos contra cinco en 18 partidos). Más allá de ese rasgo dominante, este duelo que en breve cumplirá 97 años tiene varias particularidades y rarezas: en los años 20 (la década en la que Huracán fue el más campeón junto a Boca, también su clásico rival de entonces), los de Parque Patricios no pudieron ganarles a los de Boedo ni con el notable equipo de 1928; sin embargo, en el peor momento de Huracán (los últimos 35 años) la diferencia es de sólo dos duelos en favor del CuervoEntre 1957 y 1961 San Lorenzo estableció el récord de nueve victorias sucesivasen 1976, el Globo le devolvió un golpe histórico: le ganó los cinco clásicos de la temporada, un caso único en el fútbol argentino. San Lorenzo tiene más títulos (13 a 5 en la máxima categoría del fútbol argentino); pero llegó a Primera un año después (en 1915) y perdió la categoría cinco años antes (en 1981). Los de Boedo, además, se jactan de otra verdad: según datos oficiales de la AFA, están terceros en la tabla histórica de venta de entradas en el profesionalismo; y Huracán, sexto.

Martín Tenca es abogado, riguroso conocedor de la historia de San Lorenzo y uno de los socios del club que ya aportó para el fideicomiso por la Vuelta a Boedo. También fue uno de los 100 mil cuervos que estuvo en Plaza de Mayo para reclamar lo que les pertenece: la restitución de su estadio, el Gasómetro robado en los días duros de la última dictadura. Cuenta sobre este clásico que sigue de cerca: "Es como jugar contra tu primo. Le querés ganar de todas las maneras. Y después lo querés cargar toda la semana o hasta el próximo clásico. Pero nunca lo dejás de estimar como lo que es: ese primo al que le ganás tan seguido. Y aunque se trate de la mayor diferencia entre rivales tradicionales, el clásico seguirá siendo siempre el mismo". Su abuelo Juan Santiago, recuerda, tenía el carnet de los dos clubes. Era azulgrana desde el nacimiento, pero le agradaba que los Quemeros ganaran. Excepto en la cita barrial, claro.

Roberto Guidotti, co-autor del libro oficial del centenario de Huracán, brinda su mirada: "Es el más porteño de todos los partidos que el fútbol argentino pueda ofrecer. Porque más allá de que hay tantos Huracanes y San Lorenzos en el país, la referencia barrial es ineludible. Y también el respeto, siempre presente más allá de la despreciable violencia de barras".

El periodista Eduardo Bejuk, quien conoce esta historia por haberla vivido desde la profesión pero sobre todo desde adentro, lo retrató alguna vez con el trazo impecable de sus palabras, en 2007, el año del último regreso de Huracán a la A: "Se viene el clásico de barrio más grande del mundo. Los violentos casi lo matan. Desde el folclore, vamos a  resistir. No vamos a dejar de chicanearnos, porque el clásico es eso. Y no vamos a rendirnos, Cuervos y Quemeros, los de verdad, los del café, el billar, el boliche. No: a este clásico no lo encontrás en paquetes turísticos. Es de una multitudinaria intimidad, bastión anti-globalización, porteño, reo, misterioso como un tango homerístico, compadrito como un cuento borgeano, mío, tuyo, nuestro, eterno..."

Compartieron superhéroes desde los primeros días. Luis Monti tiene un historial enorme en el fútbol: entre otras cosas, fue subcampeón del mundo con Argentina (en 1930) y campeón con Italia (en 1934). Antes de eso, junto a su hermano Enrique, participó del primer título de Huracán, en 1921. Al año siguiente, "Doble Ancho" -como le decían por ese tamaño que justificaba su condición de patrón del mediocampo- se fue a San Lorenzo y resultó tricampeón (1923, 1924 y 1927) y símbolo de ese tiempo. Era un caudillo, un líder corajudo, un centrojás de los que imponían respeto. Se formó en Parque de los Patricios y Boedo lo trasladó al mundo: tras el Mundial de Uruguay fue transferido a la Juventus, donde también se consagró. El de Alfredo Carricaberry es otro caso emblemático. Jugaba de wing, como los de ese tiempo menos tacticista: pegado a la raya, encarador, proclive a la gambeta. Un crack inobjetable de aquellos días. Como Monti, dio las tres vueltas olímpicas para el club que había fundado Lorenzo Massa en 1908. Luego, ya en el profesionalismo, aceptó un ofrecimiento de Huracán. Y a principios de los años 30 lució sin inhibiciones el Globo de Jorge Newbery en el pecho. Nadie lo observó como una traición o una herejía. Era un testimonio de ese clásico y de ese tiempo, que el periodista Mariano Reverdito reseña en su libro "Del potrero a las canchas de Football".

Las historias cruzadas continuaronmientras Héctor Veira era mago y emblema de San Lorenzo, compartía un departamento frente al Zoológico con el más representativo de los hinchas de Huracán, el inolvidable Ringo Bonavena. No sólo eso: iba a jugar al billar a la sede de la Avenida Caseros. Y hasta por una temporada se puso la camiseta blanca junto a su amigo Narciso Doval, El Loco, otro ídolo bajo el cielo del Gasómetro. El Toscano Rendo -figura con las dos camisetas- puede ir al Ducó o al Nuevo Gasómetro y en ambos lugares recibe esos abrazos que cuentan la misma gratitud. Leandro Romagnoli se crió en un ambiente decididamente quemero, en Pompeya, pero se hizo hincha e ídolo de San Lorenzo. Hay otro caso encantador fuera del campo de juego: Homero Manzi -simpatizante de Huracán- le pone su nombre a una de las esquinas más significativas para los Gauchos, San Juan y Boedo. Y también, en 1948, le puso poesía de tango a esa geografía de Cuervos y de Quemeros, en "Sur": "San Juan y Boedo antiguo, y todo el cielo, / Pompeya y más allá la inundación. / Tu melena de novia en el recuerdo / y tu nombre flotando en el adiós... /  La esquina del herrero, barro y pampa, / tu casa, tu vereda y el zanjón, / y un perfume de yuyos y de alfalfa / que me llena de nuevo el corazón. / Sur, paredón y después.../ Sur, una luz de almacén...."

Ahora, por primera vez en la historia, el clásico se disputará a pesar de que están en diferentes categorías. Ni cuando San Lorenzo jugó su única temporada en la B (en 1982) ni en ninguna de las diez temporadas de Huracán en la B Nacional (en cuatro ciclos distintos), se vieron las caras. Esta vez, en el ida y vuelta que propone la Copa de los Clásicos, el viejo duelo demostrará que también es resistente a las averías de cualquiera de sus participantes. Porque vive, porque late, porque se percibe en cada rincón de esa geografía que le pertenece, la de los barrios de ese sur porteño que los vio nacer.





Venganza de los dioses: la esquina clásica de Boedo lleva el nombre de un quemero.


martes, 3 de julio de 2012

Fútbol argentino: el anillo milagroso de Grondona!







Confesión que me averguenza: después de las definiciones que se produjeron en el fútbol argentino durante los últimos quince días (campeón a pedido familiar, árbitros indefendibles a dedo, ascensos y  descensos extraños,  salvatajes a domicilio, castigos injustos, denuncias, declaraciones y  ríos de tinta inútiles), me siento un estúpido por concurrir asiduamente a la cancha a ver a mi equipo favorito y sufrir con sus andanzas. ¿Más pruebas que éstas? Es difícil resumir aquí la sucesión de sospechas. Básicamente, la conquista del campeonato Clausura por Arsenal de Sarandí, el conformismo de Tigre y Boca; el ascenso meteórico a primera de River Plate y Quilmes; Rosario e Instituto de Córdoba, fracasados en el intento. San Lorenzo salvado milagrosamente del descenso a la B Nacional, Banfield cayendo sin escalas a ese abismo. Bengalas y asesinatos que se castigan en unos casos y en otros, no. Arbitrajes insosteibles.

Me viene a la memoria mi infancia, cuando veía por TV el programa "Titanes en el ring" a sabiendas que las peleas no eran reales y había ganadores arreglados. Nos afanan hasta las ilusiones. Pero nosotros  necesitamos seguir andando. Fútbol para todos. Quevaser. Horanosaurus.




PD: pedido de perdón y pequeña explicación para los no informados al respecto. El anillo motivo de los chistes de arriba es de oro y tiene una frase acuñada "Todo pasa". Su dueño es Julio Grondona, capitoste de la Asociación del Fútbol Argentino-AFA desde los años setenta (también con gran poder en la FIFA). Los dirigentes de los clubes que componen esa asociación no se animan a votar contra suyo jamás -por miedo a represalias políticas y económicas- por lo cual se supone que mantendrá la presidencia del organismo hasta su muerte. Allegado a Independiente de Avellaneda, tuvo participación y preferencias en el desarrollo del club Arsenal de Sarandí (localidades vecinas del Gran Buenos Aires sur). Se supone que su sustento familiar es un negocio de ferretería. A la usanza de nuestros sindicalistas traidores (¿quién imita a quién?), deja en posiciones de poder a su descendencia: no se sabe con que méritos, un hijo suyo es colaborador de alto nivel de la selección argentina de fútbol y fracasado técnico de sus inferiores, cuya renuncia se extravió en el Correo Argentino. Y el otro, es presidente del mencionado club Arsenal, uno de los de menor adhesión y masa societaria pero último campeón de fútbol  de la máxima categoría en el país, casi un capricho. Según afirmó un vigente periodista deportivo, cuando ese equipo salió campeón de la copa Sudamericana en 2007, se vió beneficiado por las autoridades pues, en el entretiempo de la final contra un equipo mexicano, cambiaron la reglamentación de la definición, a su favor. Grondona: un auténtico "padrino" en el siglo XXI, protegido por todos los gobiernos argentinos contemporáneos, desde dictaduras a autodenominados "progresistas". Un producto del país que somos. 




BONUS TRACK 1

"Julio Grondona murió (*) y en muchos medios pareció que acababa de irse un prócer. Sus funerales tuvieron el status de un jefe de Estado, con la presencia de la Presidenta (Cristina Kirchner) en el velorio y el homenaje de la guardia montada de la Bonaerense incluida. Todo en memoria de un hombre que durante 35 años consecutivos fue presidente de la AFA, que comenzó su carrera allí con la bendición de la dictadura militar y la terminó con la del kirchnerismo, una parábola no tan difícil de entender si se deja a un lado la retórica" (Marcelo A. Moreno, Clarín 03/08/14 en el artículo "Barenboim al gobierno, la imaginación al poder"). 

(*) Grondona falleció el 30 de julio de 2014.

BONUS TRACK 2. Ya hubieron suficientes indicios sobre la impudicia e inmundicia de Grondona durante todos estos años que pasaron. Al solo efecto de ilustrarlo e informar a algún ingenuo que lo considere un buen dirigente, pego esta noticia que confirma lo sabido. Algunos chupamedias que aún quedan en los medios y le deben pleitesía, que siguen defendiendo a este padrino del subdesarrollo, igual que sus hijos millonarios. En una de esas tenemos suerte y empiezan a cerrar el culo. 

FIFA Gate: un banco suizo reconoció que depositó 30 millones de dólares en sobornos para Julio Grondona

El Julius Baer admitió haber depositado coimas al ex presidente de la AFA, entre otros, por derechos de televisación. El banco deberá pagar otros 79 millones como multa a la Justicia de Nueva York. InfoBAE 28/05/21. Por Sergio Levinsky.

El banco suizo Julius Baer (BJB) admitió haber pagado al fallecido ex presidente de la AFA y vicepresidente senior de la FIFA, Julio Grondona, 30 millones dólares de sobornos por el FIFA-Gate y deberá pagar una multa de otros 79 millones a la Justicia de Nueva York, informaron los fiscales a cargo de la investigación.

El BJB, un banco suizo de operaciones internacionales, llegó a un acuerdo con un tribunal federal de Brooklyn, Nueva York, por el que admitió que llegó a pagar un total de 36 millones de dólares en coimas que partían desde ejecutivos de empresas mediáticas (menciona específicamente a Alejandro Burzaco de Torneos y Competencias) hacia los principales dirigentes del fútbol sudamericano hasta 2015 para obtener beneficios en la adquisición de derechos de transmisiones de competencias futbolísticas sudamericanas.

El BJB –que ahora deberá pagar el doble de lo que admite haber tramitado ilegalmente- celebró un “acuerdo de procesamiento diferido” de tres años con la Justicia de Brooklyn, Nueva York, como parte del proceso que lleva adelante la magistrada Pamela Chen a propósito de una información criminal presentada en el Distrito Este de NJ que acusaba al banco de conspirar para lavar dinero. Como parte de ese acuerdo, el BJB deberá pagar una multa de 43.320.000 dólares y se le confiscarán otros 36.368.400.

El esquema de sobornos pasaba por el argentino Jorge Luis Arzuaga, un ex gerente de relaciones del BJB que trabajaba en las oficinas del banco en Montevideo y en Zurich, y que se declaró culpable en junio de 2017 y por esta razón fue sentenciado por la jueza Chen a tres años de libertad condicional en noviembre de 2020.

Arzuaga admitió haber recibido pagos en subcuentas del BJB por parte de empresas mediáticas sudamericanas desde febrero de 2013 hasta mayo de 2015 –cuando se produjo la redada del FBI que detuvo a varios de los dirigentes sudamericanos en el hotel Baur Au Lac de Zurich, donde se alojaban con motivo del, Congreso de la FIFA que iba a reelegir como presidente de la entidad a Joseph Blatter-.

Esos pagos, según admitió el BJB, fueron de 36.368.400 dólares en transacciones ilegales que eran facilitadas por sus empleados que luego hacían la vista gorda ante operaciones sospechosas que debían reportar inmediatamente a la entidad, como sostiene el informe de la Justicia de Nueva York y aclara que esta oficina “responsabilizará a aquellas corporaciones o individuos que utilicen el sistema bancario estadounidense con fines corruptos”.

Según las admisiones, el banco ya sabía que las cuentas de los clientes de Arzuaga estaban vinculadas con el fútbol internacional y que contaban con alto riesgo de corrupción pero un alto ejecutivo de BJB ordenó que se acelerara la apertura de esas cuentas por el lucro que significaban.

Burzaco, ex titular de Torneos y Competencias, se declaró culpable de conspiración, extorsión y otros delitos en noviembre de 2015, en tanto que Grondona aparece mencionado en la causa como “Señor del Fútbol Número 1” debido a que falleció antes de iniciarse el proceso judicial.

Según el reporte, Grondona recibió 30 millones de dólares correspondientes al otorgamiento de derechos de transmisión de los Mundiales 2018, 2022, 2026 y 2030 de los que 25 millones fueron transferidos a una subcuenta del BJB.

Burzaco admitió que TyC también pagó decenas de millones de dólares a otros dirigentes de la Conmebol para obtener también derechos de transmisión de las Copas América de 2015, 1019 y 2023, y de la Copa América Extra del Centenario de 2016 así como de partidos de la Copa Libertadores de América.

Entre los dirigentes que aparecen recibiendo los pagos, se señaló a Eugenio Figueredo, ex miembro del Comité Ejecutivo de la FIFA y ex presidente de la Conmebol y de la Asociación Uruguaya de Fútbol, a Marco Polo Del Nero, otro ex miembro del Comité Ejecutivo de la FIFA y ex presidente de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF), José María Marín, también ex titular de la CBF, al paraguayo Juan Ángel Napout, ex vicepresidente de la FIFA y ex titular de la Conmebol, y al boliviano Romer Osuna, ex miembro de la FIFA y ex tesorero de la Conmebol.

Tanto Arzuaga como Burzaco negociaron con los investigadores y admitieron los delitos cometidos a cambio de una reducción de sus condenas y según los documentos presentados ante la Corte de Nueva York, se detalla que los argentinos dueños de la empresa “Full Play”, Hugo y Mariano Jinkis, también participaron de acuerdos delictivos aunque ambos (padre e hijo) se encuentran en libertad en la Argentina luego de que el juez federal Claudio Bonadío rechazara su extradición a los Estados Unidos en 2016.

La Justicia de Nueva York destacó como “grave conducta” el hecho de que el BJB no se haya presentado por su propia voluntad, y el papel esencial del banco en el esquema fraudulento por más de dos años y que “obstaculizó la investigación del departamento y no presentó las pruebas requeridas”, aunque se valoran los “importantes esfuerzos” posteriores por “remediar” su programa de cumplimiento, por lo que rebajó un cinco por ciento del valor a la multa originalmente establecida.

La resolución judicial indicó en su resolución que “las instituciones financieras que se vuelven cómplices de los esfuerzos de sus clientes para lavar fondos ilícitos enfrentan sanciones importantes” y que “desde el momento de la primera acusación relacionada con la FIFA, el departamento ha prometido responsabilizar a las instituciones financieras involucradas en este esquema criminal global y estamos cumpliendo”, según afirmó Nicholas McQuid, fiscal adjunto de la División en lo Penal del Departamento de Justicia y uno de los anunciantes del acuerdo con el BJB junto con Mark J. Lesko fiscal del distrito Este de Nueva York, William Sweeney Jr, subdirector a cargo de la Oficina de Investigación del FBI, y Ryan Korner, agente del Servicio Criminal de Investigación de la oficina de Los Ángeles.